El microaprendizaje sigue siendo una de las tendencias en auge en el ámbito del e-learning, por lo que es fundamental que las empresas estén al día de las prácticas recomendadas. En este artículo, te damos todas las claves para crear cursos de microaprendizaje eficaces con los que formar a tus empleados.
Imagínate que te has comprado una planta y ahora te toca cuidarla. ¿Por dónde empiezas? Tienes claro que las plantas necesitan agua para vivir, pero no sabes exactamente cuánta necesita esa especie en concreto. Así que entras en Google y buscas el nombre de la planta para saber qué cuidados necesita. Seguramente no te apuntarás a un curso de botánica para averiguarlo. Dicho de otra forma, lo más probable es que vayas directo al contenido de microaprendizaje.
Así pues, ¿qué es el microaprendizaje y cuáles son sus ventajas?
El microaprendizaje es contenido de aprendizaje que se imparte en pequeñas dosis, es decir, fragmentos de información muy específica en lugar de exposiciones más amplias. Puede darse en formatos muy variados, como vídeos explicativos, archivos PDF, cursos e infografías. El denominador común es que todos estos tipos de contenido son breves y concisos. De este modo, el usuario adquiere los conocimientos con rapidez y precisión.
Y cuando sea el momento de ponerte en marcha, justo debajo tienes las características clave de un buen contenido de microaprendizaje. Úsalas como guía para crear tu propio material.
Si ya lo tienes todo a punto, no pierdas de vista estos consejos sobre cómo crear contenido de microaprendizaje eficaz.
El primer paso para crear contenido de microaprendizaje es definir el público objetivo y entender sus necesidades. ¿A cuáles de tus compañeros o equipos les resultará útil tu contenido? Hazte las preguntas pertinentes para determinar el enfoque que darás al curso. Por ejemplo, ¿qué aspectos de la materia conocen o desconocen los estudiantes? ¿Se les da bien la tecnología? ¿Prefieren aprender sobre la marcha (con el móvil, por ejemplo)? Dar respuesta a estas preguntas te ayudará a adaptar el contenido de microaprendizaje a las necesidades específicas de los estudiantes.
Como con todos los contenidos de e-learning que creas, tienes que marcarte un objetivo para la formación antes de ponerte manos a la obra. En el caso del microaprendizaje, la diferencia estriba en que el objetivo del contenido desarrollado es único y lo más específico posible. Debes saber exactamente qué conocimientos o habilidades quieres trasladar a tus estudiantes en el curso, así no solo agilizarás el proceso de creación de microaprendizaje, sino que también evitarás la incorporación de contenido irrelevante.
El microaprendizaje es breve por definición. ¿Cómo de breve? Los estudios apuntan que, para resultar eficaz, debe durar entre dos y siete minutos. No obstante, puesto que la capacidad de atención está muy mermada, no hay garantías de que los estudiantes lleguen hasta el final del contenido, aunque solo dure unos minutos. Dada esta circunstancia, a la hora de crear material de microaprendizaje, conviene asegurarse de que una lectura en diagonal del contenido permitirá a los estudiantes quedarse con las ideas principales. Esto es especialmente útil si usas el microaprendizaje para formar en competencias sociales, ya que los empleados podrán poner en práctica lo aprendido tan pronto como acaben el curso.
Si el tema es nuevo para los estudiantes, incorpora ejemplos con los que se puedan identificar y que les permitan sacar sus propias conclusiones. Puedes recurrir a situaciones de la vida real que los estudiantes se encontrarán durante el desempeño de su trabajo. Así no solo podrán aplicar lo aprendido en su día a día, sino que también afianzarán mejor los conocimientos.
Si usas un tono conversacional que refleje la forma de hablar de los estudiantes, estos conectarán mejor con el contenido. Te recomendamos redactar el contenido de microaprendizaje con una voz activa, de modo que las ideas calen mejor y los estudiantes saquen conclusiones y retengan la información más fácilmente.
El contenido tiene que ser breve y conciso, pero eso no basta para mantener el interés de los estudiantes. Puedes hacerlo más atractivo combinando el texto con imágenes llamativas o elementos interactivos. También puedes usar un formato más original, como el vídeo. Los vídeos apelan a los sentidos visual y auditivo, creando así una experiencia multisensorial que favorece la retención de estudiantes.
Nuestros expertos han creado la guía definitiva para
ayudarte a elegir la herramienta de autoría que
mejor se adapte a las necesidades de tu empresa.
Antes de abordar las necesidades de formación de tus estudiantes con contenido breve y eficaz, es fundamental que optimices también tu proceso de creación de contenido. A continuación, presentamos los elementos más importantes que debe tener la herramienta de autoría de e-learning que uses para crear cursos de microaprendizaje.
Si la herramienta de autor es demasiado compleja, te obligará a pasar mucho tiempo aprendiendo cómo funciona y esto repercutirá en los plazos. Si, por el contrario, la herramienta presenta una interfaz intuitiva, podrás empezar a crear cursos desde el primer momento. Crear cursos en Easygenerator es tan fácil como arrastrar y soltar contenido, por lo que cualquier empleado puede crear formaciones, independientemente de su bagaje profesional.
Las herramientas de creación de contenido en la nube te permiten acceder al contenido desde cualquier dispositivo que tenga conexión a internet. Y, ahora que el teletrabajo está a la orden del día, se revelan como una opción muy práctica. Por ejemplo, si has empezado a crear un curso en la oficina, puedes continuar donde lo has dejado desde la comodidad de tu hogar. Al no depender de un dispositivo o una ubicación concretos, se agiliza la creación de contenido y nadie pierde el tren de la formación.
Como hemos visto antes, los elementos multimedia amenizan en gran medida el aprendizaje. Elige una herramienta de autor que te permita insertar imágenes, infografías o vídeos en el contenido, ya sea a través de enlaces o mediante la carga o incrustación de archivos.
Cuando los estudiantes pueden interactuar con el contenido de aprendizaje y aplicar lo aprendido en su día a día, la formación se vuelve más estimulante. Además, los elementos interactivos mejoran la retención de estudiantes.
Es inevitable que las empresas tengan que actualizar el contenido de vez en cuando, por eso necesitas una herramienta de autor con la que poder hacer estos cambios de forma sencilla. Así te evitas tener que crear el mismo curso desde cero y, a la larga, ahorras tiempo y dinero.
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En Easygenerator encontrarás estas y muchas otras funciones para crear contenido de microaprendizaje sin apenas esfuerzo. Con nuestra herramienta de autor intuitiva y en la nube, cualquiera puede crear cursos. Haz cambios en el contenido siempre que lo necesites sin necesidad de enviárselo de nuevo a los estudiantes, de modo que el material siempre esté actualizado.