1. Experiencia personalizada
El blended learning ofrece a los estudiantes una experiencia personalizada, ya que les permite aprender desde casa y a su ritmo para asimilar bien cada tema. Mediante los cuestionarios y las pruebas online, los instructores pueden saber qué estudiantes progresan adecuadamente y cuáles tienen dificultades. Además, durante las clases pueden centrarse en las necesidades, los puntos fuertes y las áreas de mejora de los estudiantes. De esta forma, las sesiones se aprovechan más, se genera un ambiente más colaborativo y se abre la puerta a una mayor participación.
2. Mayor participación
El blended learning utiliza diferentes materiales de aprendizaje, como infografías, imágenes, vídeos, tablas o gráficas. Esto facilita la concentración de los estudiantes, la adquisición de conocimientos y su interiorización.
3. Experiencias mejoradas
Una de las grandes ventajas del blended learning es que convierte el aprendizaje en una actividad divertida, gracias a la combinación del aprendizaje tradicional con materiales interactivos. Permite proporcionar a los estudiantes contenido interactivo en cualquier lugar, sea cual sea el tema de la formación. Así los estudiantes cuentan con herramientas eficaces y, además de pasarlo bien mientras aprenden, obtienen un mayor control sobre el proceso.